Los operadores jurídicos-laborales, están habituados a indemnizaciones tasadas. Sin embargo, ni cumplen su función resarcitoria ni finalidad disuasoria alguna. Este sistema vive una profunda crisis. Las conductas infractoras se reiteran y masifican (abuso de la contratación temporal, prácticas antisindicales, vulneraciones de derechos fundamentales, etc.). El artículo 183 LRJS quiso acabar con esa injusticia resarcitoria social. Pero la falta de hábito y cultura derivada de la tarificación ha neutralizado sus virtudes, salvo ciertas experiencias innovadoras que analizamos con detalle en esta publicación |