El carlismo catalán ha sido una de las culturas políticas más ricas de la Cataluña contemporánea e historiarlo permite deshacer mitos y estereotipos sobre la Cataluña interior o lallamada despectivamente «Cataluña del tractor». Expresión de la contrarrevolución, inauguró uno de los ciclos guerra-civilistas más largos de la Europa del siglo XIX y, en plena sociedad industrial y burguesa, construyó una rica red social de círculos y casinos y decenas de cabeceras de prensa, mientras conseguía trece escaños en las elecciones generales de 1871. En una reconstrucción rica en detalles y con un relato trepidante, Luis Ferran Toledano descubre un momento capital en la historia del catalanismo |